WIRIKUTA, LUGAR SAGRADO DEL PUEBLO WIXÁRIKA
El pueblo wixárika considera que Wirikuta es el lugar donde nació el sol y donde habitan sus deidades y ancestros, convertidos en kaukayarite (deidades petrificadas). Por ello, cada elemento del desierto es sagrado. En este territorio también nace y crece el hikuri o peyote, medicina sagrada del pueblo wixárika y uno de los enteógenos más poderosos e importantes de la medicina tradicional en el mundo. Este cactus, por sus propiedades, les permite comunicarse con sus deidades.
Desde hace siglos, el pueblo wixárika peregrina a Wirikuta para recolectar su medicina sagrada y ofrecer tributos a sus dioses. Es en este desierto donde los ma’arakame (curanderos tradicionales) reciben dones espirituales a través de sus ofrendas. Allí muchos de ellos aprenden a sanar, cantar y soñar, habilidades esenciales que emplean en su labor sanadora.
Dentro del universo wixárika, el desierto representa la meta anual de su camino espiritual. Al concluir la peregrinación, se espera que las bendiciones solicitadas durante semanas de ayuno, sacrificios y ofrendas lleguen a su comunidad. Esta práctica también fortalece el equilibrio en la relación con sus deidades. Incluso, consideran que esta peregrinación sostiene la vida de toda la humanidad.
UNIVERSO WIXÁRIKA
México alberga una amplia diversidad de pueblos con ricas tradiciones medicinales, especialmente en el ámbito chamánico. A lo largo del país, estas comunidades comparten una cosmovisión arraigada en rituales y en una conexión profunda con entidades espirituales, mediante cantos, sueños, plantas enteógenas y estados de trance.
Un ejemplo notable es el pueblo wixárika, cuya vida ritual se articula en torno a ofrendas, mitos, danzas y cantos. Su cosmovisión se entrelaza con una mitología viva, donde montañas, ríos y piedras son considerados ancestros petrificados o kakayauritas. Su calendario ritual se estructura con base en ceremonias dedicadas a estos sitios sagrados, reforzando así su vínculo con la naturaleza y el mundo espiritual.
LUGARES SAGRADOS Y PEREGRINACIONES
La peregrinación constituye el ritual central del ciclo anual wixárika. Desde tiempos antiguos, viajan hacia los sitios donde, según su cosmovisión, surgieron sus deidades y se creó el mundo:
- Wirikuta (San Luis Potosí)
- Hauxa Manaka (Durango)
- Tatei Paritek+a (San Luis Potosí)
- Haramara (Nayarit)
- Xapawiyeme (Jalisco)
- Te’akata (Jalisco), entre muchos otros.
Esta peregrinación no sólo reafirma su vínculo espiritual, sino que también preserva el equilibrio cósmico. Es una obligación para quienes aspiran a convertirse en ma’arakame. Durante el recorrido, se busca encontrar el hikuri o peyote, y se preparan ofrendas como flechas, jícaras, velas y diversos objetos rituales.
UNESCO: RUTA WIXÁRIKA POR LOS SITIOS SAGRADOS HASTA WIRIKUTA (TATEHUARÍ HUAJUYÉ)
La Ruta Wixárika es una serie de 20 enclaves que abarcan más de 500 km a través de cinco estados en el centro-norte de México. Este entramado de senderos conecta paisajes sagrados fundamentales para las prácticas espirituales y culturales de los pueblos indígenas wixárika. La ruta parte de la Sierra Huichol y conduce a Wirikuta en el desierto de Chihuahua, con sitios sagrados adicionales en Nayarit y Durango. Atraviesa diversas regiones ecológicas e incluye rituales vinculados a deidades ancestrales, la agricultura y el bienestar de la comunidad. Conocido como «Tatehuarí Huajuyé»> o el Camino de Nuestro Abuelo Fuego, encarna un profundo significado espiritual y ambiental.
Fuente: UNESCO/CPE













